Los productores autoconvocados dieron su grito de basta porque no aguantan más
La proclama marcó el cansancio de un sector que pide políticas estratégicas, reglas de juego claras e igualdad de condiciones.
Reglas de juego claras, mismas condiciones para todos, una señal y un mensaje de que se está trabajando para atender los problemas del agro, una estrategia productiva, un estado fuerte pero austero fueron algunos de los pedidos que esta tarde miles de productores autoconvocados en Durazno le hicieron por momentos al gobierno y por momentos al sistema político en general.
"Este grito de basta expresa el duro sentimiento de que no se aguanta más", afirmaron en la proclama.
La lectura de este texto estuvo en la voz del comunicador Jorge Landi, quien hizo peticiones específicas que estuvieron en línea con el tono general del discurso, que marcó el cansancio que el sector tiene con las políticas –o falta de ellas- para atender la situación coyuntural y para pensar en escenarios de largo plazo.
Con recurrencia se abordó el punto del tamaño y costo del estado y la necesidad de establecer líneas de acción para reducir el gasto. "El déficit fiscal lleva a todo esto", dijo el lector de la proclama luego de analizar algunos de los problemas que enfrenta el sector.
"Queremos ver una señal, queremos recibir un mensaje que no significa mucha plata", pidieron en relación al gasto público y a las "ineficiencias" de algunas empresas del estado.
"Todo estos años hemos sufrido la transferencia de recursos para mantener un estado cada vez más pesado e ineficiente", señalaron.
En su proclama, los productores autoconvocados respondieron a los dichos del presidente Tabaré Vázquez, quien había reclamado más eficiencia al sector arrocero. "Ineficientes pese a haber batido todos los récords históricos de producción y exportación. Argumentan que al país le va bien, que las exportaciones aumentaron. Pero a la hora de pasar por el colador queda poco y nada para el que invierte, arriesga y produce", leyó Landi.
Los productores exigieron terminar con el "centralismo" montevideano y una estrategia que les permita ser más competitivos a nivel internacional.