Arroz abre caminos

En Paraguay se estima que existen unas 160.000 hectáreas de arroz cultivadas, siendo la media nacional 6.000 kilos por hectárea. ABC Rural visitó el establecimiento San Pablo, del señor Pablo Jovic, en donde se están logrando 10.000 kg/ha, a base de trabajo, tecnología y disciplina.

Hace cinco años arrancamos este proyecto de cultivo de arroz en la compañía San Dionisio, distrito de General Delgado, departamento de Itapúa, zona en donde no contamos con ningún curso de agua, entiéndase arroyo o río para regar las parcelas, la topografía debía corregirse al igual que la fertilidad del suelo, ya que prácticamente era una zona muy poco productiva, empezó diciendo su propietario eventual (tierras alquiladas), Pablo Jovic.

“Empezamos hace 5 años, y casi un año nos llevó todo lo referente a preparación del tajamar que tiene una extensión de 700 hectáreas (2 metros de profundidad) el cual se carga con agua de lluvia; este espejo de agua es de donde se extrae el vital líquido para regar un total de 1.300 hectáreas de arroz, y que por medio de la ingeniería y desniveles del suelo, el agua vuelve hasta a recargar el tajamar”, explico Jovic.

De 6.500 a 10.000 kg

Pablo Jovic fue claro al señalar que, en el primer año de producción el rendimiento de kilos por hectárea no fue exactamente muy alentador, ya que se llegó a los 6.500 kilos por hectárea por ser un suelo pobre; sin embargo, todo sirvió como experiencia para ir corrigiendo errores y ya en el segundo año se logró aumentar a 7.000 kilos por hectárea, al tercer año se llegó a los 8.500 kilos y el año pasado (2019) logramos cosechar los 10.000 kilos por hectárea, gracias a que seguimos al pie de la letra todas las recomendaciones del ingeniero agrónomo Héctor Ramírez, quien nos está asesorando en este trabajo.

Ciclo de cultivo

Si hablamos del ciclo de cultivo del arroz en la zona de General Delgado, podemos decir que la cosecha se realiza entre los meses de enero y febrero, a medida que las parcelas son cosechadas estás ya reciben una fertilización con gabazo o restos de la cosecha, esto se puede hacer con suelo húmedo y lodo sin problema; sin embargo luego de esto, se debe realizar todo lo que tiene que ver con la nivelación del suelo, preparación de taipas o camellones que solo se puede hacer cuando el suelo está totalmente seco y que lleva su tiempo (fertilización, nivelación y preparación de abril a mayo. Nosotros empezamos la siembra el 20 de agosto aproximadamente, así aprovechamos las lluvias de setiembre, octubre, noviembre que sirven para que no le falte agua para el riego de los cultivos, explicó nuestro entrevistado.

Trabajo y biodiversidad

Jovic destacó que gracias a esto dan trabajo a la gente, “prácticamente una vez que se cultiva ya se tienen muchos trabajos manuales, principalmente las malezas que se sacan a mano, los paleros, aguadores llegando directamente a casi 150 personas e indirectamente a unas 500 personas”.

Además, quiero destacar que mucha gente dice que el arroz contamina y cosas así, sin embargo nosotros acá tenemos un reservorio con peces adentro, además de las aves que llegan de todos lados, y es falso lo que se dice, ya que acá desarrollamos todo lo que tiene que ver con las buenas prácticas agrícolas y de producción.