Cierran ruta en repudio de una arrocera y de la Seam
Un grupo de 250 personas de localidades afectadas de la Cuenca del Yhaguy cerraron ayer la Ruta 2 Mariscal Estigarribia a la altura del Km. 82, en forma intermitente. Fue en repudio a la Seam, la Fiscalía del Ambiente y la Agro-ganadera Pirí Pucú, que desvío el río Yhaguy para un arrozal..
Un grupo de aproximadamente 250 personas, según cálculos de la Policía Nacional, cerraron la Ruta 2 Mariscal Estigarribia a la altura del Km. 82, en forma intermitente, por espacio de dos horas, desde las 10:00 hasta las 12:00, aproximadamente, lo que causó malestar en los usuarios de la vía, que no pudieron ejercer su derecho de circular libremente.
La medida de fuerza se realizó en repudio de la AgroGanadera Pirí Pucú, de Fernando Serrati; del ministro Rolando de Barros Barreto, titular de la Secretaría de Ambiente, y del fiscal Jalid Rachid, de la Fiscalía del Medio Ambiente.
Una de las organizadoras de la manifestación, Prof. Secundina Sosa, manifestó que tuvieron que salir a la calle para que sus reclamos sean escuchados. Sostienen que la Seam no cumple con su función de velar por el medio ambiente al permitir que un emprendimiento privado desvíe el cauce del río Yhaguy en la localidad de San José Obrero. Añadió que lo único que desean es que las leyes de protección de los recursos naturales se cumplan, con el objetivo de que se pueda prever un grave daño ecológico en la zona. Lamentan, asimismo, la actuación del fiscal Jalid Rachid en el caso.
Según los datos, el conflicto en la zona se originó luego de la colocación de una bomba de agua en las cercanías del río Yhaguy por la AgroGanadera Pirí Pucú, propiedad de Fernando Serrati, quien cuenta con cultivos de arroz en la zona de la compañía Alfonso Tranquera de San José Obrero.
El emprendimiento ya fue objeto de varias denuncias y procesos judiciales, con resultado de sobreseimiento tanto por la Unidad de Delitos Ambientales del Ministerio Público –siendo fiscal el propio Rachid– como por la Comisión Nacional de Defensa de los Recursos Naturales (Conaderna). Una de las últimas denuncias fue realizada por Justo Jamil, Pelagio Martínez y Marina de Rodríguez, entre otros.
Según los documentos presentados, la colocación de la bomba de agua fue realizada con todos los permisos y bajo la supervisión de funcionarios de la Seam. Previamente, se realizaron estudios hidrológicos, y los técnicos (paraguayos y brasileños) determinaron que con cada inundación y suba de aguas el nivel se eleva por más de tres metros.
En la propiedad de la empresa agroganadera hay un reservorio de agua de 350 hectáreas por 2,5 metros de profundidad, donde se pueden almacenar 8.750.000 metros cúbicos de agua.
Según Serrati, la bomba solo funciona cuando los niveles de la crecida del río Yhaguy aumentan considerablemente. Esta situación es verificada por fiscalizadores de la Seam que visitan la zona en cualquier momento, refirió.
Los miembros del Consejo de Aguas, que está conformado por autoridades locales y representantes de varias organizaciones sociales y civiles, como la Asociación de Pescadores de San José Obrero, entre otros, también realizan verificaciones en forma sistemática sobre el uso del agua, se informó.